En este 2020 tan extraño hemos tenido que dar el último adiós a quien fuera presidente de ALCER JAÉN durante gran parte de su historia reciente. Dadas las circunstancias asociadas a la situación de pandemia que durante estos meses estamos atravesando, nos ha sido imposible realizar un acto homenaje como hubiésemos deseado. Por ellos, queremos dedicarle estas palabras, hasta que sea posible despedirle como merece y como deseamos:
Querido José Manuel.
Has sido promotor y partícipe del crecimiento de esta asociación durante muchos años. Al margen de ser paciente renal, aportaste tus valores personales a este gran proyecto diario, encaminado a la mejora de la calidad de vida y acceso a los recursos sociales y sanitarios de nuestro colectivo.
Tus valores personales, el tesón, tu espíritu resolutivo, tu capacidad de gestión y de representación asociativa, han estado a gala de ALCER JAÉN en todo el territorio Nacional.
Te agradecemos siempre haber sido insignia de los derechos de nuestro colectivo. No olvidamos tu lado luchador, tu capacidad de superar todos los obstáculos que te impuso la enfermedad. Tu sonrisa, tu ejemplo de talante, tu seguridad personal, tu carisma. Tu carácter. Y tu perseverancia.
Has cuidado al colectivo y al equipo de profesionales con las que una y otra vez has contado en esta trayectoria, que te agradecen el haber permitido desarrollar su carrera profesional junto a ALCER JAÉN.
No olvidaremos jamás tu mirada, tu sonrisa, tu afecto y tu carácter bromista pero firme.
Sabemos que nos estarás mirando y diciendo “corta ya el rollo”. Y así lo hacemos. Con humor.
Nunca olvidaremos tu presencia aquí, en cada rincón de esta asociación y tampoco todos los momentos compartidos. Existirás siempre en la memoria de todos nosotros, en la memoria de ALCER JAÉN.
Cuidaremos este proyecto como lo has hecho tú tantos años.
Gracias José Manuel.
Gracias Crespo.
Gracias J.M.
Te echaremos de menos.
Con cariño, ALCER JAÉN.